Jeshael Rivera Villalón
SAN JOSÉ ITURBIDE
La contraloría municipal ha emitido un código de ética que tiene como objetivo regular la conducta de los funcionarios públicos y entre otras cosas, establece las acciones que deben evitar los trabajadores del gobierno local para incurrir en actos de acoso, hostigamiento sexual, así como hechos de corrupción.
El documento consta de 8 paginas y hace unas semanas fue dado a conocer a los secretarios y directores, y en los días recientes esta siendo repartido en las distintas oficinas de gobierno.
Dentro del artículo 7 fracción XIII relativo a las “reglas de comportamiento digno” se establece que los funcionarios “deben conducirse en forma digna, sin realizar expresiones, adoptar comportamientos, usar lenguaje o hacer acciones de hostigamiento o acoso sexual, manteniendo para ello una actitud de respeto hacia las personas con la que tiene o guarda relación en la función pública”.
Para ello, se estipula que los trabajadores del gobierno deben evitar hacer señas con las manos o con los movimientos del cuerpo que sean sexualmente sugerentes o tener contacto sugestivo como tocamientos, abrazos, besos o manoseos con personas que trabajen con ellos o que sean usuarios del servicio público.
Asimismo, se prohíbe a los funcionarios hacer regalos o dar preferencias indebidas que manifiesten cierto interés sexual hacia una persona y obligar a las personas a realizar actividades ajenas a su trabajo por rechazar proposiciones de carácter sexual.
Las condicionantes a las personas u otros trabajadores (as) también son otra acción prohibida para los funcionarios.
“Condicionar la obtención de un empleo, su permanencia en él o las condiciones del mismo a cambio de aceptar conductas de naturaleza sexual”
“Condicionar la prestación de algún trámite o servicio público o evaluación escolar a cambio de que la persona usuaria, estudiante o solicitante acceda a sostener conductas sexuales de cualquier naturaleza” se detalla en el texto.
Otro factor que contempla la normativa es que los trabajadores del gobierno sean cuidadosos en cómo se expresan de las demás personas ya sea de manera directa o a través de cualquier medio.
“Expresar comentarios, burlas, piropos o bromas hacia otra persona referentes a la apariencia o la anatomía con connotación sexual, bien sea presenciales o a través de algún medio de comunicación”, se les prohíbe a los funcionarios públicos.
Aparte de lo ya señalado, el código de ética de los servidores públicos establece reglas de integridad, de transparencia, de procesos de contrataciones, de manejo de programas, de evaluaciones, de integridad y otras.
Unas de las cosas que se manifiestan en dichos apartados son: evitar incurrir en actos de discriminación, ocultar información pública, contratar a personas que no cumplan con los perfiles laborales requeridos y dar preferencias en las contrataciones de distintos servicios o productos.
El contralor municipal, César Contreras Maldonado, externó que el documento busca regular la conducta de los trabajadores del gobierno dentro y fuera de los espacios y horarios de trabajo, así como evitar que incurran en actos de corrupción.
Aseguró que cualquier persona puede denunciar a los servidores públicos que cometan faltas al citado código y que sí se dará seguimiento a las quejas, y en caso de ser necesario, se sancionará a los responsables de acuerdo a la Ley de Responsabilidades Administrativas del Estado de Guanajuato y sus Municipios.
Con tal contexto, llamó a la población a hacer las denuncias que considere pertinentes pues este nuevo código se va a dar a conocer a través de distintos medios y en la página de internet del gobierno local.
“Cualquier persona puede hacer de conocimiento al órgano interno de control, los presuntos incumplimientos al código de ética, aportando los elementos necesarios para demostrar las infracciones que se hayan cometido por parte de las y los servidores públicos”, se manifiesta en el documento.